En la lucha contra el Covid-19, China coadyuva a cumplir la idea de una comunidad de futuro compartido de la humanidad, para ello ha adoptado las medidas de prevención y control enérgicas y exhaustivas que suma con los esfuerzos de la comunidad internacional para evitar la propagación epidémica a nivel global.
Los esfuerzos de China no son solamente para su gente, sino también para el resto del mundo. Después del surgimiento del virus, el gobierno chino ha visto siempre por el interés de su gente, y con una valentía inimaginable, cerró ciudades y construyó en contra reloj dos hospitales de alta especialidad para casos graves de la enfermedad; además creó 16 hospitales temporales para casos leves y mejoró 86 hospitales más ante la crítica situación que se vivió. Ante la contingencia, de forma rápida y ordenada, se ordenó el traslado de decenas de miles de médicos y personal sanitario de otras regiones a Hubei, asimismo, se movilizó una gran cantidad de material médico y artículos de uso diario que fueron enviados también a la provincia con el propósito de ayudar lo más pronto posible. Existe ahora una tasa mayor de personas recuperadas y una baja considerable de la tasa de mortalidad por el virus. La velocidad de reacción por parte de China, ha brindado al mundo una valiosa ventana de tiempo para prepararse ante la epidemia. Antonio Guterres, secretario general de la ONU y Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS, entre otros, aseveraron que las acciones contundentes de China han limitado la propagación del virus tanto a nivel nacional como más allá de sus fronteras, estableciendo así un nuevo estándar para la respuesta a epidemias y aportando útiles experiencias que pueden servir de referencia a la comunidad internacional en un momento crítico del manejo de crisis de enfermedades infecciosas y para fomentar la gobernanza global en materia de salud pública. Hasta ahora, los líderes de más de 170 países y los jefes de más de 40 organizaciones regionales e internacionales enviaron mensajes, hicieron llamadas telefónicas y emitieron declaraciones para expresar su simpatía y apoyo a China.
China otorga suma importancia a la cooperación sanitaria internacional. A la luz de los principios de apertura y transparencia, China ha informado oportunamente a la OMS sobre el brote y ha mantenido la comunicación con los países pertinentes desde el inicio, además compartió la secuencia genética del virus, así como los cebadores y sondas para la detección de ácido nucleico. China colabora con las entidades extranjeras acreditadas en el país, incluyendo las de México, para otorgar ayuda en labores informativas y de asistencia consular, de esta manera la mayoría de los ciudadanos extranjeros residentes en China sienten seguridad y confianza, que se refleja en el apoyo y respaldo con las autoridades locales chinas. Frente a la diseminación del virus en algunos países y regiones, China ha ofrecido su asistencia dentro del alcance de su capacidad, donando materiales médicos a Japón y Corea del Sur, además de enviar equipos de expertos a Irán, Irak e Italia. Los kits de prueba, fármacos y otros materiales de ayuda humanitaria suministrados por China están jugando un papel crucial en la lucha antiepidémica local. Aunado a todo este esfuerzo en especie, China también ofreció 20 millones de dólares a la OMS para mejorar los sistemas de salud pública en los países en desarrollo.
En este momento crítico del combate del Covid-19 para toda la comunidad internacional, algunos personajes, en vez de concentrarse en la prevención epidémica, inventan comentarios discriminatorios o politizados para eludir la responsabilidad y desviar la atención. Su comportamiento vergonzoso ha sido rechazado por toda la gente con conciencia. En esta era de la globalización, todos los países están integrados e interdependientes, por lo que la enfermedad es un reto común para todos, en donde todos debemos trabajar en conjunto. Hay que decir no a los rumores, prejuicios y discriminación. En este sentido, China reforzará su coordinación y cooperación internacional para luchar contra el Covid-19.
En primer lugar, China desplegará la activa cooperación internacional y regional contra la epidemia. Ampliaremos la cooperación bilateral y multilateral, manteniendo la excelente comunicación con la OMS, además exploraremos otras posibilidades de prevención y control transfronterizo. Fortaleceremos la coordinación interinstitucional entre las autoridades de sanidad, cuarentena y control de fronteras. Compartiremos oportunamente información de la epidemia, medidas de prevención y control, así como resultados de las investigaciones en torno al virus, e intensificaremos el desarrollo conjunto de medicamentos y vacunas antivirales. China, como un país responsable, toma medidas enérgicas e integrales para controlar la epidemia en su propio territorio, además ofrecerá su asistencia de acuerdo a su alcance a los países y regiones que sufren la propagación del virus.
En segundo lugar, China profundizará la participación en la gobernanza global en la salud pública. Seguiremos apoyando a la ONU y la OMS en su papel esencial de respuesta ante esta y cualquier otra emergencia sanitaria, la intención es coadyuvar a estos mismos en mejorar los mecanismos de la gobernanza global en materia de salud pública. Además, proponemos que en la agenda internacional se eleve la importancia del tema sanitario y se impulse grandes proyectos de cooperación internacional en materia de salud.
Por el momento la lucha contra la epidemia se encuentra en la fase más crucial. China no retrocederá, ni mucho menos se resignará sólo al bienestar individual. Está dispuesta a trabajar con la comunidad internacional para contener la epidemia y para salvaguardar nuestro planeta, a fin de construir una aldea global que comparte las glorias y desgracias, y desarrollar una comunidad de futuro compartido de la humanidad con acciones concretas.