El embajador chino en México Zhu Qingqiao publicó el 18 de marzo en Milenio un artículo de opinión titulado "China reanuda su producción mientras se mejora la prevención de epidemia". A continuación el texto completo del artículo.

Ante la inesperada y ardua prueba del Covid-19, el gobierno chino en comunión con su pueblo enfrentó una batalla de prevención y control de la epidemia. El presidente Xi Jinping dirigió personalmente y presidió varias reuniones en las que pidió priorizar siempre la vida y la salud de la gente, además, generó instrucciones para contener la epidemia con estudios científicos. La semana pasada el presidente Xi realizó una visita la ciudad de Wuhan, capital de la provincia de Hubei, y planteó una nueva etapa de prevención y control de la epidemia, en la cual se debe incorporar la reanudación de las actividades económicas y productivas. La visita generó un sentimiento de confianza y esperanza de lograr pronto la victoria definitiva en la lucha antiepidémica.

Inmediatamente después de que inició el brote, China tomó las medidas más amplias, estrictas y exhaustivas para contener la propagación. Gracias a este duro esfuerzo, actualmente la situación es totalmente distinta con una tendencia positiva y resultados alentadores. Al cierre del día 16 de marzo, sólo había 8 mil 976 casos confirmados en tratamiento y casi 69 mil pacientes fueron dados de alta. En las otras regiones aparte de Hubei, los nuevos casos confirmados (no importados) crecieron a un solo dígito durante las últimas tres semanas pasadas. En Hubei, hay cero crecimiento durante varios días, con excepción de Wuhan, donde se registró un solo caso el día 16. Todos los 16 hospitales temporales fueron cerrados y los profesionales médicos de otras partes ya iniciaron su rumbo a casa al completar su trabajo en Hubei. Se ha incrementado considerablemente la capacidad productiva de dispositivos y materiales médicos. La combinación de tratamiento entre medicina tradicional china y la medicina occidental ha dado resultados extraordinarios, y en Hubei más del 90% de los enfermos son tratados con la primera. A la par de estas medidas, se avanza en la investigación de fármacos antivirales y vacunas. China hasta el momento ha desarrollado 14 reactivos diferentes de detección, que han sido usados en más de 15 millones de personas. En abril, algunas vacunas entrarán en la fase de pruebas clínicas. La lucha antiepidémica ya entró en una etapa crucial, y la tarea de prevención y control sigue siendo ardua. China continuará tomando esta tarea con la importancia debida y se mantendrá alerta para lograr la victoria en la batalla contra el coronavirus.

En el cumplimiento de la prevención y control de la enfermedad, China está redoblando esfuerzos para reiniciar las actividades económicas y productivas en Hubei y el resto del país. El gobierno central ha reforzado el control macroeconómico del país para estabilizar el empleo y el comercio exterior, impulsar el trabajo de combate a la pobreza y la producción agrícola en primavera, así como garantizar las condiciones básicas de vida del pueblo. Se está recuperando ordenadamente la producción y la vida normal, y se está potencializando la dinámica de la economía china. El gobierno ha hecho un compromiso ante el pueblo, que es el contrarrestar el impacto de la epidemia y hará todo lo que tenga a su alcance para lograr las metas fijadas para la reducción de la pobreza dentro del año en curso.

Para tal objetivo, el Banco Central de China está listo para proporcionar un préstamo de 500 mil millones de yuanes adicionales sobre la base de los 300 mil millones previamente asignados. Los gobiernos de distintos niveles adoptan múltiples medidas para apoyar y promover la reactivación de las operaciones de las empresas, particularmente las relacionadas a la cadena global de suministro y otras involucradas, a fin de estabilizar las cadenas globales industriales. Hasta ahora, la tasa de recuperación de las quinientas mayores firmas manufactureras y las principales empresas de producción y procesamiento de cereales del país superó el 97% y el 94% respectivamente, mientras las Pymes aceleran el paso para retomar de forma regular su vida laboral, con un porcentaje superior a 90% en la mayoría de las provincias. Las transnacionales como Tesla, Airbus y Samsung también han reiniciado su producción en China. No podemos descartar el impacto de la epidemia en la economía de China, sobre todo de Hubei, pero es limitado y controlable en general. Los fundamentos que sostienen el sólido crecimiento económico a largo plazo permanecen sin cambios. Kristalina Georgieva, directora gerente del FMI, y Robert Merton, ganador del premio Nobel de Economía, entre otros, han mostrado su optimismo sobre las perspectivas de la economía china, la cual, en su juicio, volvería a la normalidad en el segundo trimestre. China, la segunda mayor economía, además de ser la fábrica y el mercado mundial, es también un centro global de I+D, y del sistema industrial, por lo cual ocupa un lugar importante en las cadenas industrial, de suministro y de valor del mundo. En consecuencia, cuando las empresas chinas acelerarn la reanudación de su producción y la economía china se recupera, se inyectará la confianza y fuerza a la economía global bajo la sombra del coronavirus.

Como dijo el presidente Xi, "la nación china ha experimentado muchas duras pruebas a lo largo de su historia, pero nunca se ha visto desbordada. En cambio, se ha convertido en más fuerte y resiliente, creciendo y levantándose ante las adversidades". Bajo el liderazgo del Partido Comunista de China y con la fortaleza del sistema del socialismo con características chinas, el gobierno y el pueblo chino vencerán la batalla contra la epidemia. China mantendrá sin duda alguna su tendencia positiva del desarrollo socioeconómico, y está dispuesta a trabajar con sus socios comerciales, para contribuir más a la estabilización de la economía mundial y al progreso global.